lunes, 7 de octubre de 2013

Ciencia bien dirigida...

En la Biblia leemos: “El alma sin ciencia no es buena...” (Proverbios 19:2)

La pregunta era: “¿Hemos evolucionado tecnológica y espiritualmente de manera simétrica  o hemos crecido técnica pero no humanamente? La cultura, ¿nos ha ido agregando capas de barniz, civilizándonos y esa cáscara se fisura y permite salir toda la bestialidad que nos retrotrae a la época de las cavernas?”

El encargado de dar respuesta, dijo: “Algunos piensan que no puede haber progreso científico y tecnológico al margen de la moral. Otros piensan que la ciencia y la técnica son incapaces de autolimitarse”

Son interrogantes humanos, que de esta manera no reciben la respuesta adecuada a la inquietud que presentan... Sin embargo, La Biblia es categórica al decirnos:
  • “Y se corrompió la tierra delante de Dios, y estaba la tierra llena de violencia... toda carne se había corrompido su camino sobre la tierra” (Génesis 6:11-12)
  • “Dice el necio en su corazón: No hay Dios. Se han corrompido, hacen obras abominables...” (Salmos 14:1-2)
La ciencia y el conocimiento provienen de Dios, siendo otro de sus regalos para el ser humano:
  • “...he llenado del Espíritu de Dios, en sabiduría y en inteligencia, en ciencia y en todo arte...” (Éxodo 31:3; 35:31)
  • “sabiduría y ciencia te son dadas...” (2 Crónicas 1:12) 
  • “...porque en todas las cosas fuisteis enriquecidos en él, en toda palabra y en toda ciencia” (1 Corintios 1:5)
Sin embargo, ninguna ciencia y ningún conocimiento, alejados de Dios darán buenos resultados:
  • “...sus almas se derriten con el mal. Tiemblan y titubean como ebrios, y toda su ciencia es inútil” (Salmos 107:26-27)
  • “Los ojos de Jehová velan por la ciencia; mas él trastorna las cosas de los prevaricadores” (Proverbios 22:12)
  • “Porque te confiaste en tu maldad, diciendo: Nadie me ve. Tu sabiduría y tu misma ciencia te engañaron, y dijiste en tu corazón: Yo, y nadie más” (Isaías 47:10)
Los que confiamos en Dios debemos cuidar de no dejarnos llevar por estos desvíos:
  • “Como fuente turbia y manantial corrompido, es el justo que cae delante del impío” (Proverbios 25:26)
  • “...guarda lo que se te ha encomendado,  evitando las profanas pláticas sobre cosas vanas, y los argumentos de la falsamente llamada ciencia, la cual profesando algunos, se desviaron de la fe...” (1 Timoteo 6:20-21)
En Romanos 11:33 y 36 leemos: “¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus  juicios, e inescrutables sus caminos! Porque ¿quién entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su consejero?...  Porque de él, y por él, y para él son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén”

La oración del Apóstol Pablo era: “Y esto pido en oración, que vuestro amor abunde aun más y más en ciencia y en todo conocimiento, para que aprobéis lo mejor...” ((Filipenses1:9-10)

Recordemos: Crezcamos en ciencia y conocimientos... ¡Pero que ellos nos lleven a un mayor acercamiento al Señor que nos dio estos dones!
TBS

domingo, 6 de octubre de 2013

Belleza para Siempre...

En la Biblia leemos: “El corazón alegre hermosea el rostro; mas por el dolor del corazón el espíritu se abate” (Proverbios 15:13)

La nota decía: “Dime tus hábitos y te diré como atentan contra tu belleza... ¿Lo que hacemos en  nuestra vida cotidiana, puede resultar contraproducente y perjudicar de alguna manera nuestro cuerpo? La respuesta  es sí. Los malos hábitos como... dañan más de lo que pensamos... ¿Qué elecciones boicotean tu estética...?”
Así es... Tenemos la posibilidad de ser magníficamente “hermosos, bellos, resplandecientes” y la mayoría de las veces nos conformamos con ser del montón, feos o directamente producir espanto a quien nos mire.

¿Cómo es esto? ¿Debemos hacernos una cirugía estética? ¿Debemos correr tras el desenfreno de aquellos que hacen cualquier cosa por ser jóvenes y bellos? Pues... no... Solamente debemos seguir los Consejos de Dios para embellecer nuestro interior, lo cual se reflejará en nuestro exterior.

La Belleza verdadera la provee el Señor, y sin mezquindades...
  • “Adorad a Jehová en la hermosura de la santidad... Porque Jehová tiene contentamiento en su pueblo; hermoseará a los humildes con la salvación” (Salmos 96:9; 149:4)
  • “Como está escrito ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncia la paz, de los que anuncian buenas nuevas!” (Romanos 10:15)
Caminar con el Señor nos permite disfrutar del reflejo de su Persona, y al mismo tiempo nos da una belleza y una fortaleza inigualables:
  • “Dad a Jehová la gloria debida a su nombre; adorad a Jehová en la hermosura de la santidad... De Sion, perfección de hermosura, Dios ha resplandecido” (Salmos 29:2; 50:2)
  • “Gloria y hermosura es su obra, y su justicia permanece para siempre” (Salmos 111:3)
  • “Adorno de gracia dará a tu cabeza; corona de hermosura te entregará” (Proverbios 4:9)
  • “El que confía en sus riquezas caerá; mas los justos reverdecerán como ramas” (Proverbios 11:28)
  • “Y veréis, y se alegrará vuestro corazón, y vuestros huesos reverdecerán como la hierba...” (Isaías 66:14)
Nos ofrece una luminosidad que solo se obtiene en comunión con El:
  • “Los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia a la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad” (Daniel 12:3)
  • “Para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual resplandecéis como luminares en el mundo” (Filipenses 2:15)
Los malos hábitos que atentan contra esta belleza provienen del pecado, que oscurece y afea la vida:
  • “Aféenlo tinieblas y sombra de muerte...” (Job 3:5)
  • “Porque se aumentó la iniquidad de la hija de mi pueblo más que el pecado de Sodoma... oscuro más que la negrura es su aspecto...” (Lamentaciones 4:6,8)
  • “Entonces Nabucodonosor se llenó de ira, y se demudó el aspecto de su rostro...” (Daniel 3:19)
No permitamos que la perfección que obtenemos en Dios se desperdicie siguiendo prácticas mundanas...
  • "Así que, amados, puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios" (2 Corintios 7:1)
Recordemos: La juventud y la belleza se hacen eternas en la Presencia de Nuestro Dios y Señor...
TBS

sábado, 5 de octubre de 2013

Un Camino Anunciado...

En la Biblia leemos: “Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo; el cual, siendo el resplandor de su gloria y la imagen misma de sus sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas” (Hebreos 1:1-3)

La nota decía: “Crónica de un final anunciado... después de anunciar en múltiples ocasiones que... finalmente la necesidad... y la realidad se impone frente a la fantasía...”  Luego hablaba de “rechazar las tendencias mundiales por ineficaces... y finalmente... un reconocimiento de que hay leyes... seguramente la medida es tardía y de haberse tomado antes y voluntariamente... hubiera tenido efectos positivos frente a juristas y acreedores...”

Se trata de conceptos económicos, de deudores y acreedores, pero... ¡Que bien puede aplicarse a nuestra vida y condición! Puesto que todos somos deudores delante de Dios:
  • “Y perdónanos nuestras deudas...” (Mateo 6:12)
El Señor Jesucristo pagó por estas deudas y culpas al morir en la Cruz:
  • “Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores... Mas el herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados” (Isaías 53:4)
  • “Quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados” (1 Pedro 2:24)
Necesitamos Su Obra y Su Presencia en nuestras vidas:
  • “Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo...” (Salmos 42:2)
  • “Dios, Dios mío eres tú; de madrugada te buscaré; mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela...” (Salmos 63:1)
  • “Porque yo estoy afligido y necesitado, y mi corazón está herido dentro de mí” (Salmos 109:22)
Cualquier otra “tendencia” resulta ineficaz para obtener Perdón y Vida Eterna:
  • “...en el nombre de Jesucristo de Nazaret... a quien Dios resucitó de los muertos... Este Jesús es la piedra reprobada por vosotros los edificadores, la cual ha venido a ser cabeza del ángulo. Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos” (Hechos 4:10-12)
Muchos se dejan llevar de fantasías que no pueden salvarlos:
  • “Aborrezco a los que esperan en vanidades ilusorias; mas yo en Jehová he esperado. Me gozaré y alegraré en tu misericordia...” (Salmos 31:6-7)
  • “Los que siguen vanidades ilusorias, su misericordia abandonan... la Salvación es de Jehová” (Jonás 2:8-9)
Debemos tomar estas “medidas salvadoras” mientras haya tiempo:
  • “Así, pues... os exhortamos también a que no recibáis en vano la gracia de Dios. Porque dice: en tiempo aceptable te he oído, y en día de salvación te he socorrido. He aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación”  (2 Corintios 6:1-2)
Recordemos: Reconozcamos al Señor hoy, sabiendo que ninguna otra cosa será efectiva para la Eternidad...
TBS

viernes, 4 de octubre de 2013

Hoy... Para Mañana...

En la Biblia leemos: “Porque las palabras que me diste, les he dado; y ellos las recibieron...” (Juan 17:8) 

La nota decía: “En economía es urgente dejar la complacencia... los costos y la productividad deben ser compatibles con los valores oficiales... no se puede enfrentar los problemas reales con desequilibrios fiscales... es necesario el reconocimiento del desastre económico para poder enfrentar el futuro... Para lograrlo es necesaria una buena educación, con personas que se capaciten suficientemente para actuar como corresponde y no ser engañados con circunstanciales momentos de abundancia”

Los hijos de Dios no somos economistas, pero la Biblia nos enseña también acerca de principios similares a los de la Economía para ser aplicados a las relaciones con Dios y con nuestro prójimo...

Necesitamos conocer la Palabra de Dios:

Para ser productivos...
  • “...al  abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio” (Efesios 6:19)
  • “...para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo...” (Colosenses 4:3)
Para no engañar ni ser engañados...
  • “Y ni mi palabra ni mi predicación fue con palabras persuasivas de humana sabiduría, sino con demostración del Espíritu y de poder, para que vuestra fe no esté fundada en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios” (1 Corintios 2:4-5)
  • “Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo” (Colosenses 2:8)
Para tener constancia...
  • “Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre...” (1 Corintios 15:58)
  • “Acordándonos sin cesar delante del Dios y Padre nuestro de la obra de vuestra fe, del trabajo de vuestro amor y de vuestra constancia en la esperanza en nuestro Señor Jesucristo” (1 Tesalonicenses 1:3)
Para mostrar equilibrio...
  • “...no estoy loco, excelentísimo Festo, sino que hablo palabras de verdad y  de cordura” (Hechos 26:25)
  • “Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de ´si que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno” (Romanos 12:3)
Debemos capacitarnos correctamente para encarar el futuro con precisión y guía adecuada. Para ello tenemos la Palabra de Dios:
  • “Porque el mandamiento es lámpara, y la enseñanza es luz, y camino de vida las reprensiones que te instruyen” (Proverbios 6:23)
  • “¿Quién de vosotros oirá esto? ¿Quién atenderá y escuchará respecto al porvenir?” (Isaías 42:23)
Si escuchamos y obedecemos la Palabra de Dios tendremos compatibilidad, o un mismo sentir, con el Señor:
  • “Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús...” (Filipenses 2:5)
Recordemos: Solamente aferrándonos a la Palabra de Dios nuestro porvenir será espiritualmente productivo...
TBS

jueves, 3 de octubre de 2013

Una Sola Dirección...

En la Biblia leemos: “Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro...” (Mateo 6:24)

El informe hablaba acerca de una “metamorfosis” y explicaba lo siguiente: “Asistimos a una mutación sorprendente en... de cara a las elecciones...”. Luego enumeraba varios puntos que durante años se explicaron de determinada manera y al ver que no daban los resultados esperados, comenzaron a ser cambiados substancialmente, ofreciendo otras propuestas, completamente  diferentes a las iniciales. El escritor se preguntaba: “¿A quienes quieren representar?” nombrando grupos totalmente opuestos el uno del otro... “A éstos o a aquellos?”

Podríamos formularnos esta pregunta: "¿A quién representamos nosotros con nuestra vida?"

¿Fuimos transformados por la Obra Salvadora del Señor Jesucristo? Entonces tenemos un solo discurso para dar, una sola manera de vivir, una propuesta para transmitir y un solo Señor a quien servir...
  • “Porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos... y si vosotros sois de Cristo, ciertamente linaje de Abraham sois, y herederos según la promesa” (Gálatas 3:27-29)
  • “Pero ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo estabais lejos, habéis sido hechos cercanos por la sangre de Cristo... Esto pues digo y requiero en el Señor: que ya no andéis como los otros gentiles... no habéis aprendido así a Cristo, si en verdad le habéis oído, y habéis sido por él enseñados, conforme a la verdad que está en Jesús...” (Efesios 2:13; 4:21)
  • “Así pues, téngannos los hombres por servidores de Cristo, y administradores de los misterios de Dios. Ahora bien, se requiere de los administradores, que cada uno sea hallado fiel” (1 Corintios 4:1-2)
  • “Sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís” (Colosenses 3:24)
¡Fuimos transformados por la Obra Salvadora del Señor Jesucristo!... Entonces permanezcamos en su servicio hasta el fin:
  • “No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta” (Romanos 12:2)
  • “Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor” (2 Corintios 3:18)
  • “Pero deseamos que cada uno de vosotros muestre la misma solicitud hasta el fin, para plena certeza de la esperanza...” (Hebreos 6:11)
Podremos caer alguna vez, pero no debemos permanecer caídos... Podremos errar la conducta o la palabra; incluso Pedro mismo lo negó tres veces... Pero debemos encauzar inmediatamente el rumbo para seguir en Su Servicio:
  • “Y el Señor encamine vuestros corazones al amor de Dios, y a la paciencia de Cristo” (2 Tesalonicenses 3:5)
Recordemos: Somos del Señor o no lo somos... pero ello debe quedar demostrado con nuestras vidas y acciones...
TBS

miércoles, 2 de octubre de 2013

¿Palabrería?

En la Biblia leemos: “Pues el propósito de este mandamiento es el amor nacido de corazón limpio, y de buena conciencia, y de fe no fingida, de las cuales cosas, desviándose algunos, se apartaron a vana palabrería” (1 Timoteo 1:5-6)

La nota, no exenta de asombro, comunicaba acerca de un Senador que pronunció un discurso de veintiún horas con el propósito de impedir la votación de una reforma de ley de su país: “.. táctica que establece que un legislador puede `secuestrar´ un debate siempre que pueda hablar de manera continuada para forzar una votación o para impedirla" .Este Senador “abordó el tema que le interesaba, pero también habló de su familia, de temas personales, gustos televisivos, etc. Todo lo que se le ocurrió para no dejar de hablar...”

La Biblia nos presenta como “cartas” para ser leídas o escuchadas...
  • “Nuestras cartas sois vosotros, escritas en nuestros corazones, conocidas y leídas por todos los hombres, siendo manifiesto que sois carta de Cristo expedida por nosotros, escrita no con tinta, sino con el Espíritu del Dios vivo...” (2 Corintios 3:2-3)
En esta condición, siendo de esta manera la “voz audible de Dios en la tierra”, tal como los legisladores son la “voz de su pueblo”,  ¿`secuestramos´ la atención de los oyentes/testigos con nuestras palabras o actos?
  • “Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos” (Mateo 5:16)
¿Qué ven y oyen los que nos observan? ¿Distraemos su atención del Señor a causa de nuestros errores y pecados o los encaminamos hacia El?
  • “Sino que como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir... manteniendo buena vuestra manera de vivir entre los gentiles; para que en lo que murmuran de vosotros como de malhechores, glorifiquen a Dios en el día de la visitación, al considerar vuestras buenas obras” (1 Pedro 1:15; 2:12)
  • “Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu fe y pureza... Ocúpate en estas cosas; permanece en ellas, para que tu aprovechamiento sea manifiesto a todos. Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello, pues haciendo esto, te salvarás a ti mismo y a los que  te oyeren” (1 Timoteo 4:12-16)
El Señor Jesucristo advertía acerca de la importancia de las cosas espirituales por sobre las superficiales:
  • “¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque diezmáis la menta y el eneldo y el comino, y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello... ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque limpiáis lo de fuera del vaso y del plato, pero por dentro estáis llenos de robo y de injusticia...” (Mateo 23:23-25)
Recordemos: Lo que manifestamos en nuestra vida, debe mostrar claramente al Salvador y Señor, sin distraer la atención de sobre El...
TBS

martes, 1 de octubre de 2013

Temporal o Eterno...

En la Biblia leemos: “Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin, el primero y el último” (Apocalipsis 22:13)

La nota llevaba por título: “Un futuro lleno de interrogantes”... Hablaba del cine, y cómo se advierte a través de él “todo lo que puede depararnos ese futuro que no queremos ver... el destino que aguarda en las sociedades `distópicas´, término contrario a `utópicas´ que son las que tienen planes, proyectos, doctrinas o sistemas”

Los interrogantes sobre el futuro del mundo y la continuidad de las especies desvelan al ser humano. Existen infinidad de películas, libros, historias que cuentan el fin de la humanidad y la destrucción del mundo. Muchísimos interrogantes y pocas certezas... ¿Nos sucede también?... Podemos tener muchas preguntas, pero gracias a la Palabra de Dios, quienes confiamos en El y creemos en ella, podemos tener certezas absolutas, y desarrollar nuestras existencias alrededor de ello...

En Génesis 6 nos cuenta cómo Dios destruyó la tierra por medio del Diluvio y en Génesis 9 promete no volver a hacerlo por ese medio:
  • “Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal... y dijo... raeré de sobre la faz de la tierra a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la bestia y hasta el reptil y las aves del cielo... Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová... Y murió toda carne que se mueve sobre la tierra... Y habló Dios a Noé... He aquí que yo establezco mi pacto con vosotros, y con vuestros descendientes después de vosotros... no exterminaré ya más toda carne con aguas de diluvio, ni habrá más diluvio para destruir la tierra...” (Génesis capítulo 6 y 9)
Luego, en Apocalipsis 21, Juan nos dice:
  • “Vi un cielo nuevo y una tierra nueva, porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más. Y yo Juan vi la santa ciudad... descender del cielo, de Dios... Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios...”
Más allá de la importancia de conocer el futuro del Planeta, ¿Tenemos certezas en cuanto a dónde y cómo pasaremos la Eternidad?

Apocalipsis  20:12-15 nos asegura:
  • “Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras. Y el mar entregó los muertos que había en él, y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras. Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda. Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego”
Recordemos: La vida en la tierra es temporal, la Eternidad no tiene fin, y acerca de ella deberíamos buscar Seguridad...
TBS

lunes, 30 de septiembre de 2013

Sensibilidad...

La Biblia nos dice: “Los ídolos de ellos son plata y oro... Tienen boca, mas no hablan; tienen ojos mas no ven; orejas tienen, mas no oyen; tienen narices, mas no huelen; manos tienen mas no palpan; tienen pies, mas no andan... semejantes a ellos son los que los hacen y cualquiera que confía en ellos” (Salmos 115:4-8)

La consulta de la nota era por qué, al emitirse ciertos olores, al principio pueden ser percibidos fuertemente, pero luego parecen diluirse en el aire y dejamos de sentirlos. La explicación decía: “El olor, sustancias químicas disueltas en el aire, se va volando. Pero lo interesante es que si cualquiera de nuestros sentidos es estimulado durante mucho tiempo, deja de responder... los receptores... dejan de informar al cerebro que hay un estímulo allí fuera. Este proceso se llama adaptación sensorial”

Podemos adaptarnos tanto a algo que dejaremos de percibir que está allí... La Biblia nos advierte:
  • “Esto, pues, digo y requiero en el Señor: que ya no andéis como los otros gentiles, que andan en la vanidad de su mente, teniendo el entendimiento entenebrecido, ajenos de la vida de Dios por la ignorancia que en ellos hay, por la dureza de su corazón; los cuales después que perdieron toda sensibilidad, se entregaron a la lascivia para cometer con avidez toda clase de impureza” (Efesios 4:17-19)
  • “Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo” (2 Corintios 11:3)
¡Señal de Peligro! Debemos pensar seriamente  y preguntarnos: ¿A qué nos hemos acostumbrado en la vida? ¿Qué cosas, situaciones, pecados, hemos dejado de percibir?

La Biblia nos dice que somos un olor grato a Dios:
  • “Porque para Dios somos olor grato de Cristo en los que se salvan, y en los que se pierden; a éstos ciertamente olor de muerte para muerte, y a aquellos, olor de vida para vida...” (2 Corintios 2:15-16)
Pero también nos dice que debemos ejercitar nuestros sentidos, para no endurecerlos:
  • “...el alimento sólido es para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal” (Hebreos 5:14
  • “Bienaventurado el hombre que siempre teme a Dios; mas el que endurece su corazón caerá en el mal” (Proverbios 28:14)
El Diccionario dice que “Sensibilidad” es sinónimo de “Piedad”. Por lo cual debemos ser sensibles al Señor, a su Palabra y a sus advertencias y vivir acorde a ello:
  • “Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres, enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente” (Tito 2:11-12)
  • “Puesto que todas estas cosas han de ser deshechas, ¡cómo no debéis vosotros andar en santa y piadosa manera de vivir...!” (2 Pedro 3:11)
Oremos al Señor como el salmista, pidiéndole: “Guarda mi alma, porque soy piadoso, salva tú, oh Dios mío, a tu siervo que en ti confía” (Salmos 86:2)

Recordemos: Debemos  ejercitar los sentidos, para no acostumbrarnos al “mal olor” de las cosas que nos apartan de Dios...
TBS

domingo, 29 de septiembre de 2013

Contentos y Agradecidos...

En la Biblia leemos: “Sean vuestras costumbres sin avaricia, contentos con lo que tenéis ahora; porque él dijo: No te desampararé ni te dejaré” (Hebreos 13:5)
 
En la entrevista, el conductor del programa le preguntaba a un reconocido actor si no se arrepentía de haber rechazado una importante oferta, alegando el dinero que podría haber ganado con ella. El actor le preguntaba “¿Para qué sirve?” El conductor respondía: “Para vivir mejor”. A lo cual el actor nuevamente replicaba: “¿Mejor de lo que yo vivo? Soy todo lo feliz que puede ser un tipo que vive en este mundo. Tengo mi familia, me va bien en el trabajo, la gente me quiere”. El conductor insistía, “¿No quisieras tener un avión privado, por ejemplo?”. A lo que contundentemente el actor respondió: “¡No! Hay ciertas desproporciones que son complicadas. Las sociedades modernas pretenden hacernos creer que la solución está en el individualismo, y nos entregan atados de pies y manos al consumismo. Si no tenemos el último modelo de... aunque el tuyo funcione muy bien, somos considerados tontos. Estamos desfasados”
 
Aún sin ser un hijo de Dios, este actor tiene ideas claras en cuanto a lo que puede dar felicidad. En la Biblia se nos enseña a ver las cosas de manera diferente a como el resto del mundo las ve.
 
Ser codicioso afecta todos los ámbitos de la vida:
  • “Es cierto que al necio lo mata la ira, y al codicioso lo consume la envidia” (Job 5:2)
  • “Pero  ellos a su propia sangre ponen asechanzas, y a sus almas tienden lazo. Tales son las sendas de todo el que es dado a la codicia, la cual quita la vida de sus poseedores... Alborota su casa el codicioso...” (Proverbios 1:18-19; 15:27)
  • “Pero los afanes de este siglo, y el engaño de las riquezas, y las codicias de otras cosas, entran y ahogan la palabra, y se hace infructuosa” (Marcos 4:19)
  • “Mas el pecado, tomando ocasión por el mandamiento, produjo en mí toda codicia...” (Romanos 7:8)
En Éxodo 18:21-22  la elección de Dios eran hombres de esta categoría: “...escoge tú de entre todo el pueblo varones de virtud, temerosos de Dios, varones de verdad, que aborrezcan la avaricia... ellos juzgarán al pueblo en todo tiempo...”
 
Cuidemos nuestras decisiones, para que no nos ocurra lo que previene Proverbios 28:22: “Se apresura a ser rico el avaro, y no sabe que le ha de venir pobreza” o Eclesiastés 6:2: “Hay un mal que he visto debajo del cielo... El del hombre a quien Dios da riquezas y bienes y honra, y nada le falta de todo lo que su alma desea; pero Dios no se da facultad de disfrutar de ello, sino que lo disfrutan los extraños. Esto es vanidad, y mal doloroso”
 
Colosenses 3:15 dice: “Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la que asimismo fuisteis llamados en un solo cuerpo; y sed agradecidos”
 
Recordemos: Si somos agradecidos por lo que Dios ya nos dio, no perderemos el tiempo luchando por aquello que no necesitamos...
TBS

sábado, 28 de septiembre de 2013

Muy Cerca...


En la Biblia leemos: “Gracias te damos, oh Dios, gracias te damos, pues cercano está tu nombre...” (Salmos 75:1)

La reflexión trataba acerca de las comunicaciones modernas: “El teléfono permitió mantenernos en contacto estando a distancia... la comunicación móvil, prescindiendo de la presencia de la persona junto al teléfono... los mensajes de texto facilitaron un contacto más rápido con la ventaja de la movilidad... terminaron por convertirse en sustitutos del contacto personal... prótesis más pobres pero aceptables”. Terminaba diciendo: “la tecnología actual estimula el aislamiento, ya que tendemos a olvidar al prójimo próximo”

¡Qué importante declaración! También circula la frase “acerca a los lejanos pero aleja de los cercanos” con respecto a la tecnología. 

Es un mal natural del ser humano, seguir tendencias y olvidar necesidades... Hacemos esto con las personas y afecta las relaciones. ¿Lo hacemos también con nuestro Dios?

En la Biblia se nos dice acerca del Señor:
  • “Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; y salva a los contritos de espíritu... Cercano está Jehová a todos los que le invocan, a todos los que le invocan de veras... Cercano estás tú, oh Jehová, y todos tus mandamientos son verdad” (Salmos 34:18; 145:18; 119:151)
Efesios 2:13 nos asegura: “Pero ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo estabais lejos, habéis sido hechos cercanos por la sangre de Cristo”

Es llamativo cómo, si vivimos en perfecta armonía con determinadas circunstancias, nos alejaremos automáticamente de otras:
  • “Cuanto está lejos el oriente del occidente, hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones... Se acercaron a la maldad los que me persiguen; se alejaron de tu ley” (Salmos 103:12; 119:150)
Que nuestro deseo más ferviente sea similar al del salmista, cuando proclamaba:
  • “Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré: Que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo... Dios, Dios mío eres tú; de madrugada te buscaré. Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela, en tierra seca y árida donde no hay aguas... Está mi alma apegada a ti...” (Salmos 27:4; 63:1,8)
Si mantenemos el contacto diario, continuado con nuestro Salvador y Señor, su presencia en nuestra vida la limpiará de toda influencia que nos aleje de Él y nos ayudará al mismo tiempo a acercarnos a nuestros “prójimos próximos”
  • “Y no engañe ninguno a su prójimo, sino temed a vuestro Dios...” (Levítico 25:17)
  • “El justo sirve de guía a su prójimo...” (Proverbios 12:26)
  • “Aún el gorrión halla casa, y la golondrina nido para sí, donde ponga sus polluelos, cerca de tus altares, oh Jehová de los ejércitos, Rey mío, y Dios mío. Bienaventurados los que habitan en tu casa; perpetuamente te alabarán” (84:3-4)
Si aún estamos alejados, sepamos que ahora podemos acercarnos, como dice Isaías 55:6: “Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano”

Recordemos: Si nos mantenemos cercanos al Señor, nuestras vidas serán ricas, y bendecirán a quienes nos rodean...

TBS
Nuestro Padre

En la Biblia leemos: “El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios” (Romanos 8:16)

La extensa nota informaba acerca de los hijos que algunos miembros de un ejército dejaron atrás, en territorio invadido luego de su retirada... se habla de “decenas de miles de soldados” que tuvieron hijos en esos años... luego de la guerra, esos hijos soportaron una...
penosa discriminación por ser vistos como dolorosas evocaciones de un ejército invasor... Muchos buscaron a sus padres; solo una pequeña fracción pudo hallarlos. Solamente dos docenas de padres hallados aceptaron a sus hijos... algunos padres también se movilizaron para buscar a los hijos, luego de la publicidad que se hizo sobre el tema”
 
Tristes historias... de dolor y abandono. Hijos que necesitan conocer su historia y a su padre.
 
La Biblia nos dice que somos hijos de Dios:
  • “Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios” (Juan 1:12)
  • “Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es” (1 Juan 3:2)
También nos enseña la clase de hijos que debemos ser:
  • “Yo os preguntaba: ¿Cómo os pondré por hijos y os daré la tierra deseable, la rica heredad de las naciones? Y dije: Me llamaréis: Padre mío, y no os apartaréis de en pos de mí... convertíos hijos rebeldes, y sanaré vuestras rebeliones...” (Jeremías 3:19-20)
  • "Y habéis ya olvidado la exhortación que como a hijos se os dirige, diciendo: Hijo mío, no menosprecies la disciplina del Señor, ni desmayes cuando eres reprendido por él; porque el Señor al que ama, disciplina, y azota a todo el que recibe por hijo... Dios os trata como a hijos; porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina? Pero si nos deja sin disciplina, de la cual todos han sido participantes, entonces sois bastardos, y no hijos. Por otra parte, tuvimos a nuestros padres terrenales que nos disciplinaban, y los venerábamos. ¿Por qué no obedeceremos mucho mejor al Padre de los espíritus y viviremos?” (Hebreos 12:5-9)
  • “Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren” (Juan 4:23)
Si no somos lo que Dios espera de nosotros, igualmente mantiene su actitud de Padre, como leemos en Mateo 7:11: “Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará buenas cosas a los que le pidan?”
 
Sin embargo, deberíamos responderle como buenos hijos, según leemos en Mateo 5:48: “Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto”
 
Recordemos: Nuestro Padre celestial nos eligió a pesar de lo que somos ¡Que  Amor tan grande nos brinda! Seamos pues, buenos hijos...
 
TBS

jueves, 26 de septiembre de 2013

¿Paz? ¡Paz!

En la Biblia leemos: “Diré yo: La paz sea contigo... buscaré tu bien” (Salmos 122:8-9)

Por lo general, la gente se solidariza, asombra y admira de grandes personajes mediáticos  o sociales que piden por la paz mundial. Se suman a los pedidos, campañas o cadenas de oración, lo cual no está mal en sí mismo, pero no llegan a comprender que no es ni suficiente ni totalmente exacto.

La Biblia nos dice:
  • “...cuando digan: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina... Mas vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas para que aquel día os sorprenda como ladrón” (1 Tesalonicenses 5:3,4)
  • “Sobre todas las alturas del desierto vinieron destruidores... no habrá paz para ninguna carne... Así dice Jehová... yo he quitado mi paz de este pueblo...” (Jeremías 12:12; 16:5)
  • “Destrucción viene; y buscarán la paz,  y no la habrá” (Ezequiel 7:25)
Podemos nombrarla, desearla y pedir por ella, aún podremos provocar guerras intentando conseguirla,  pero solamente la hallaremos de una manera:
  • “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón  ni tenga miedo” (Juan 14:27)
¿Cómo comprenderemos esto? Aceptando que necesitamos hacer la Paz con Dios en nuestros corazones y a la manera ofrecida por Dios:
  • “Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús” (Filipenses 4:7)
  • “Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la que asimismo fuisteis llamados en un solo cuerpo; y sed agradecidos. La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría...” (Colosenses 3:15-16)
  • “Pero ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo estabais lejos, habéis sido hechos cercanos por la sangre de Cristo. Porque él es nuestra paz, que de ambos pueblos hizo uno... aboliendo en su carne las enemistades... para crear en si mismo de los dos un solo y nuevo hombre, haciendo la paz, y mediante la cruz reconciliar con Dios  a ambos en un solo cuerpo, matando en ella las enemistades” (Efesios 2:14-16)
Necesitamos experimentar la Paz de Dios en lo más profundo de nuestros corazones, y allí sí, solo entonces, podremos compartir paz con otros:
  • “No nos arrebates juntamente con los malos, y con los que hacen iniquidad, los cuales hablan paz con sus prójimos, pero la maldad está en su corazón” (Salmos 28:3)
  • “No conocieron camino de paz, ni hay justicia en sus caminos...” (Isaías 59:8)
  • “Huye también de las pasiones juveniles, y sigue la justicia, la fe, el amor y la paz, con los que de corazón limpio invocan al Señor” (2 Timoteo 2:22)
  • “Apártate del mal, y haz el bien; busca la paz, y síguela” (Salmos 34:14)
  • “Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor” (Hebreos 12:14)
Recordemos: Ni los pedidos ni los deseos darán Paz... Solamente la Obra de Dios en nuestros corazones...
TBS

miércoles, 25 de septiembre de 2013

Verdadero Conocimiento...

En la Biblia leemos: “...por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo... Por fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía” (Hebreos 1:2; 11:3)

Entre las numerosas preguntas que se hacían los científicos de la nota, se encontraba esta: “¿De qué está hecho el Cosmos?  ¿Hay otros Universos? ¿Qué hay en el fondo de un agujero negro?...  utilizan el estudio de los átomos, que solo representan el 5% de lo que vemos alrededor, el resto está compuesto por entidades poco conocidas, materia y energía oscura... se utiliza la física cuántica para llegar a pocas conclusiones... se podrá saber más sobre agujeros negros (una de las creaciones más extremas del Universo) cuando sea posible una teoría unificada”

Para el común de las personas, que somos la gran mayoría de nosotros, estas ciencias que estudian las profundidades misteriosas de la Creación pueden resultar inalcanzables. Se cumple en nosotros lo que dice la Biblia acerca de la “escasez” de sabios... pero en cambio podemos aferrarnos a otro tipo de conocimiento y sabiduría, que nos llevará a comprender aún lo que no sabemos con exactitud.
  • “...pues mirad hermanos, vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne...” (1 Corintios 1:26)
  • “Derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo...” (2 Corintios 10:5)
  • “Para que habite Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y cimentados en amor, seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura, y de conocer le amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios” (Efesios 3:17-19)
Si entendemos que más que dar respuesta a nuestros interrogantes intelectuales o emocionales, lo que necesitamos es dar una respuesta positiva al conocimiento del Dios Creador, nos encontraremos mejor situados frente a todo lo demás:
  • “Dicen, pues, a Dios: Apártate de nosotros, porque no queremos el conocimiento de tus caminos...” (Job 21:14)
  • “Así dijo Jehová: No se alabe el sabio en su sabiduría... mas alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y conocerme, que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra...” (Jeremías 9:23)
Si entendemos que el conocimiento de Dios es a través de Su Palabra... Si entendemos que ella nos lleva a Cristo, y que en Cristo tendremos un vislumbre de los Pensamientos de Dios, entonces, solo entonces conoceremos de una manera inimaginable de otro modo:
  • “...sean consolados sus corazones, unidos en amor, hasta alcanzar todas las riquezas de pleno entendimiento, a fin de conocer el misterio de Dios el Padre, y de Cristo, en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento...” (Colosenses 2:2-3)
  • “...habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos, y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno...” (Colosenses 3:10)
Recordemos: De nada nos servirá saberlo todo si desconocemos al Más Importante...
TBS

martes, 24 de septiembre de 2013

En lo Profundo del Mar...

En la Biblia leemos: “He aquí Dios es grande, y nosotros no le conocemos... He aquí que sobre él extiende su luz, y cobija con ella las profundidades del mar” (Job 36:26,30)

La pregunta, significativa, que moviliza a los investigadores es “¿Se puede saber qué hay en el fondo del mar?”. Los científicos dicen: “El noventa y nueve por ciento del mar no ha sido explorado... ¿qué hay allá abajo? En 1960, dos investigadores descendieron once kilómetros hasta la parte más profunda del océano en busca de respuestas. Su viaje amplió las fronteras del esfuerzo humano, pero solo les proporcionó una fugaz visión del lecho marino. Los descubrimientos hechos hasta ahora son un diminuto porcentaje del extraño mundo oculto bajo las olas”

¿Qué hay en el fondo del mar? ¡Se conoce solamente el 1%!... La preguntas que nos hace el Señor al respecto a través de Su Palabra son muchas e interesantes:
  • “Quién es el que oscurece el consejo con palabras sin sabiduría... yo te preguntaré, y tú me contestarás... ¿Quién encerró con puertas el mar, cuando se derramaba saliéndose de su seno, cuando puse yo nubes por vestidura suya, y por su faja oscuridad, y establecí sobre él mi decreto, le puse puertas y cerrojo, y dijo: Hasta aquí llegarás, y no pasarás adelante, y ahí parará el orgullo de tus olas?... ¿Has entrado tú hasta las fuentes del mar, y has andado escudriñando el abismo?” (Job 38:1-11)
Tenemos algunas certezas de lo que existe hoy en el fondo del mar:
  • “Echó en el mar los carros de Faraón, y su ejército, y sus capitanes escogidos fueron hundidos en el Mar Rojo. Los abismos los cubrieron; descendieron a las profundidades como piedra” (Éxodo 15:4-5)
  • “El volverá a tener misericordia de nosotros; sepultará nuestras iniquidades, y echará en lo profundo del mar todos nuestros pecados” (Miqueas 7:19)
Y sobre todo lo demás que no sepamos, podemos repetir junto al salmista:
  • “Porque  en su mano están las profundidades de la tierra, y las alturas de los montes son suyas” (Salmos 95:4)
En cuanto  a aquellos que aún no conocen a este Dios Maravilloso, dice de ellos:
  • “Ellos han visto las obras de Jehová, y sus maravillas en las profundidades... Suben a los cielos, descienden a los abismos; sus almas se derriten con el mal. Tiemblan y titubean como ebrios, y toda su ciencia es inútil. Entonces claman a Jehová en su angustia, y los libra de sus aflicciones.  Cambia la tempestad en sosiego, y se apaciguan sus ondas. Luego se alegran, porque se apaciguaron; y así los guía al puerto que deseaban. Alaben la misericordia de Jehová, y sus maravillas para con los hijos de los hombres” (Salmos 107:24-31)
Recordemos: Si disfrutamos de la Salvación, sabemos que nuestros pecados se encuentran en el fondo del mar... ¡Y que de allí no pueden regresar!
TBS

lunes, 23 de septiembre de 2013

Lo que no sabemos...

En la Biblia leemos: “De seguro conviene que se diga a Dios... enséñame tú lo que yo no veo...” (Job 34:31-32)

Otra de las incógnitas que desvela a los científicos es saber “qué es la conciencia” y aseguran que aún no hay certezas. Para un neurobiólogo dedicado al tema “acceder a ese conocimiento es tal vez el problema más complejo al que se enfrenta la neurociencia. Las ciencias no pueden ni podrán explicar totalmente la experiencia consciente, ni medir la conciencia intrínsecamente privada, invisible, esa experiencia subjetiva e íntima que hace al ser  humano un fascinante mar de incógnitas que navegan a borde de algunas respuestas". Y termina diciendo “aunque sabemos mucho de procesos específicos, todavía no hay una teoría general del cerebro que explique su funcionamiento global”
  • “He aquí que Dios es excelso en su poder; ¡Qué enseñador semejante  a él... Acuérdate de engrandecer su obra, la cual contemplan los hombres. Los hombres todos la ven; la mira el hombre de lejos. He aquí, Dios es grande, y nosotros no le conocemos, ni se puede seguir la huella de sus años...” (Job 36:22-26)
  • “Porque Jehová da la sabiduría, y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia” (Proverbios 2:6)
Según la Palabra de Dios, la conciencia es una fuente de enseñanza para nosotros:
  • “Bendeciré a Jehová que me aconseja; aún en las noches me enseña mi conciencia” (Salmos 16:7)
  • “Mostrando la obra de la ley escrita en sus corazones, dando testimonio su conciencia, y acusándoles o defendiéndoles sus razonamientos, en el día en que Dios juzgará `por Jesucristo los secretos de los hombres, conforme a mi evangelio” (Romanos 2:15-16)
Tiene influencia en nuestra conducta y fe:
  • “Todas las cosas son puras para los puros, mas para los corrompidos e incrédulos nada les es puro; pues hasta su mente y su conciencia están corrompidas” (Tito 1:15)
  • “...no tendrían ya más conciencia de pecado” (Hebreos 10:2)
Necesita ser purificada:
  • “...guarden el misterio de la fe con limpia conciencia” (1 Timoteo 3:9)
  • “Así que hermanos, teniendo libertad para entrar en el Lugar Santísimo por la sangre de Jesucristo... Acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia...” (Hebreos 10:22)
Debemos cuidarla para que no se endurezca, para que siga siendo un instrumento del Señor para nuestra vida:
  • “...la hipocresía de mentirosos, que teniendo cauterizada la conciencia…” (1 Timoteo 4:2)
Si leemos Colosenses 1:16 y Apocalipsis 4:11 entenderemos un poco más acerca de la  maravilla de la Creación de Dios:
  • “Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles... Todo fue creado por medio de él y para él...”
  • “Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú creaste todas las cosas, y por tu voluntad existen y fueron creadas”
Recordemos: Aquello que no entendemos, también fue creado por Nuestro Dios para su Gloria...
TBS

domingo, 22 de septiembre de 2013

Así empezó...

En la Biblia leemos: “En el principio creó Dios...” (Génesis 1:1)

Una investigación enumeró los enigmas que más desvelan a los científicos. Uno de ellos es: "¿Cómo empezó la vida?" Y la respuesta que ellos mismos se dan es que “todavía no hay consenso sobre cómo pasó”... Algunos dicen que la vida comenzó en charcos calientes junto a los volcanes, otros que la trajeron meteoritos que cayeron en el mar. Aún otros opinan que en  nuestro planeta se dieron las condiciones  únicas y perfectas para que aparecieran moléculas con la capacidad de metabolismo y autorreplicación, que luego se hicieron más complejas, apareciendo las primeras bacterias y los primeros organismos multicelulares; luego la selección natural fue haciendo su trabajo para generar la tremenda diversidad de seres vivos que hoy pueblan la tierra, desde una ameba hasta el más prodigioso ser humano.

Y si, visto de esta manera, algo de razón tienen... ¡La vida vino del “exterior”, se dieron las “condiciones perfectas” y se desarrolló desde la nada  a lo más grande, el ser humano! Pero no de la manera en que intenta explicarlo la ciencia, sino tal y como nos lo relata la Palabra de Dios:
  • “En el principio creó Dios los cielos y la tierra... Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz... Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche...  Luego dijo Dios: Haya expansión en medio de las aguas, y separe las aguas de las aguas. E hizo Dios la expansión, y separó las aguas que estaban debajo de la expansión, de las aguas que estaban sobre la expansión... Y llamó Dios a la expansión Cielos...” (Génesis 1:1-8)
  • “Después dijo Dios: Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla; árbol de fruto que dé fruto según su género... Haya lumbreras en la expansión de los cielos para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las estaciones, para días y años... E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para que señorease en el día y la lumbrera menor para que señorease en la noche; hizo también las estrellas” (Génesis 1:14-18)
  • “Dijo Dios: Produzcan las aguas seres vivientes, y aves que vuelen sobre la tierra... y creó Dios los grandes monstruos marinos, y todo ser viviente que se mueve... Produzca la tierra seres vivientes según su género, bestias y serpientes y animales de la tierra según su especie...” (Génesis 1:20-25)
  • “Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza, y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal...”  (Génesis 1:26-27)
Dios es también quien nos dice:
  • “El amor nunca deja de ser; pero las profecías se acabarán, y cesarán las lenguas, y la ciencia acabará...” (1 Corintios 13:8)
  • “El que no ama, no ha conocido a Dios, porque Dios es amor.  En esto se mostró el amor de Dios para con nosotros, en que Dios envió a su Hijo Unigénito al mundo, para que vivamos por él. En esto consiste el amor; no en que nosotros  hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados” (1 Juan 3:8-10)
Recordemos: Dios nos creó y por Amor nos brinda Su Salvación...
TBS

sábado, 21 de septiembre de 2013

Reverdecer...

En la Biblia leemos: “Porque he aquí ha pasado el invierno, se ha mudado, la lluvia se fue; se han mostrado las flores en la tierra, el tiempo de la canción ha venido...” (Cantares 2:11-12)

La contratapa del diario decía: “Llegó Septiembre, luminoso y prometedor de mejores días. Por lo menos uno siente que las oscuridades del invierno se están yendo rumbo a la primavera”

Es verdad, la primavera representa brotes, nacimientos, flores, luminosidad. Todo reverdece y se llena de color, alegría, vida...
  • “De la higuera aprended la parábola: Cuando ya su rama está tierna, y brotan las hojas, sabéis que el verano está cerca...” (Mateo 24:32; Marcos 13:28)
Y la oscuridad y el frío invernales van quedando atrás, al acercarnos a nuestro Salvador:
  • “El camino de los impíos es como la oscuridad; no saben en qué tropiezan” (Proverbios 4:19)
  • “Porque no os habéis acercado al monte que se podía palpar, y que ardía en fuego, a la oscuridad, a las tinieblas y a la tempestad... Sino que os habéis acercado al monte de Sion, a la ciudad del Dios vivo, Jerusalén la celestial, a la compañía de muchos millares de ángeles, a la congregación de los primogénitos que están inscritos en los cielos, a Dios el Juez de todos... a Jesús el Mediador del nuevo pacto, y a la sangre rociada que habla mejor que la de Abel” (Hebreos 12:18-24)
También Dios nos asegura que nuestra luz va en aumento, que la primavera ha llegado a nuestras vidas...
  • “El justo florecerá como la palmera: crecerá como cedro en el Líbano. Plantados en la casa de Jehová, en los atrios de nuestro Dios florecerán. Aún en la vejez fructificarán, estarán vigorosos y verdes. Para anunciar que Jehová mi fortaleza es recto, y que en él no hay injusticia” (Salmos 92:12-15)
  • “Porque yo derramaré aguas sobre el sequedal, y ríos sobre la tierra árida; mi Espíritu derramaré sobre tu generación, y mi bendición sobre tus renuevos; y brotarán entre hierba, como sauces junto a las riberas de las aguas” (Isaías 44:3-4)
Pero cuidemos que los brotes traigan fruto bueno y no mala raíz:
  • “El fruto del justo es árbol de vida; y el que gana almas es sabio” (Proverbios 11:30)
  • “Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios, que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados” (Hebreos 12:15)
  • “...y ya también el hacha está puesta a la raíz de los árboles; por tanto, todo árbol que no da buen fruto es cortado y echado en el fuego” (Mateo 3:10)
El salmista nos dice:
  • “Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, nii estuvo en camino de pecadores, ni en silla de escarnecedores se ha sentado, sino que  en la ley de Jehová está su delicia, y en su ley medita de día y de noche. Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, que da su fruto en su tiempo, y su hoja no cae, y todo lo que hace, prosperará” (Salmos 1:1-3)
Recordemos: Por la Misericordia de Dios tenemos la oportunidad de florecer y dar buenos frutos...
TBS

viernes, 20 de septiembre de 2013

Dar, no solo pedir...

En la Biblia leemos: “Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley y los profetas” (Mateo 7:12)

En una extensa carta, un hijo de inmigrantes europeos se preguntaba: “¿Dónde quedó la cultura del esfuerzo? No hay ejemplos a seguir, todo son reclamos de derechos, pero pareciera que no hay ninguna obligación para quienes reclaman... No sé cuántas generaciones se necesitarán para retomar aquel camino...”

Es interesante. Los inmigrantes que llegaron a nuestro país luego de finalizada la guerra que  afectó a sus propios países, incluido mi padre y mis abuelos maternos, aun siendo un país con idioma y alfabeto absolutamente diferente al que conocían, lograron trabajar, construir o comprar viviendas, educar a sus hijos, comenzar de  nuevo donde no había nada. Trabajaron, la mayoría de ellos declinando la ayuda que se les daba debido a su condición de refugiados o sobrevivientes.

La carta de este hombre muestra precisamente eso: Hoy en día todos reclaman, pero no aceptan responsabilidades. Y compara con lo que conoció en su propia familia, donde la responsabilidad iba delante, donde los "derechos" se adquirían mediante el esfuerzo previo.

En la vida espiritual solemos comportarnos reclamando beneficios y olvidando deberes. Recibimos la Salvación otorgada por Dios mediante el Sacrificio del Señor Jesucristo y esperamos detrás toda la Bendición de Dios, sin prestar atención a lo que sigue a la condición de hijos de Dios:
  • “Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para  que juntamente con él seamos glorificados”  (Romanos 8:17)
Estos días, escuchando un estudio de la Palabra de Dios, recordé la promesa de Isaías 58:11...
  • “Jehová te pastoreará siempre, y en las sequías saciará tu alma, y dará vigor a tus huesos, y serás como huerto de riego, y como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan”
Y al mismo tiempo, la responsabilidad de Isaías 58:1-10:
  • “¿No es para bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas de opresión y dejar ir libres a los quebrantados... no es que partas tu pan con el hambriento, y a los pobres errantes albergues en casa; que cuando veas al desnudo lo cubras, y no te escondas de tu hermano? Entonces nacerá tu luz como el alba, y tu salvación se dejará ver pronto, e irá tu justicia delante de ti, y la gloria de Jehová será tu retaguardia. Entonces invocarás y te oirá Jehová... en las tinieblas nacerá tu luz, y tu oscuridad será como mediodía”
Dios nos ofrece todas las Bendiciones, pero nos enseña a aplicarlas en nuestro prójimo:
  • "Y como queráis que hagan los hombres con vosotros, así también haced vosotros con ellos” (Lucas 6:31)
  • “Ahora, pues, llevad también a cabo el hacerlo, para que como estuvisteis prontos a querer, así también lo estéis en cumplir conforme  a lo que tengáis” (2 Corintios 8:11)
El mismo Dios que nos bendice, nos capacita para bendecir a otros:
  • “Porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad” (Filipenses 2:13)
Recordemos: Somos más que bendecidos por Nuestro Señor... compartamos esas bendiciones con nuestro prójimo...

TBS

jueves, 19 de septiembre de 2013

Uno por Uno

En la Biblia leemos: “Al ponerse el sol, todos los que tenían enfermos de diversas enfermedades los traían a él; y él poniendo las manos sobre cada uno de ellos, los sanaba” (Lucas 4:40)

La nota, a un medico llamado “de familia” llevaba por título: “Los médicos de familia nos dedicamos a atender personas, no pacientes. Conocemos a la persona, su contexto, lo vemos en su totalidad, recuperando la noción de salud integral”

Es un concepto notable... En la mayoría de las esferas en las cuales nos relacionamos, no se observa a las “personas” sino a los números, las estadísticas y los porcentajes que ellos representan... Lamentablemente muchas veces esto también ocurre en el plano espiritual...

Es maravilloso considerar que Dios nos mira  no solamente como personas, sino que nos ve y trata con cada uno en forma individual...
  • “Pero a cada uno como el Señor le repartió, y como Dios llamó a cada uno... Pero a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para provecho” (1 Corintios 7:17; 12:7)
  • “...exhortábamos y consolábamos a cada uno de vosotros” (1 Tesalonicenses 2:11)
Conoce nuestro contexto:
  • “Dios, tú conoces mi insensatez, y mis pecados no te son ocultos” (Salmos 69:5)
Conoce nuestra persona:
  • “...porque El conoce los secretos del corazón” (Salmos 44:21)
Conoce nuestras acciones:
  • “Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino...” (Isaías 53:6)
Aún sabiendo todo esto, El atendió nuestra necesidad y nos aplicó Su Medicina:
  • “Jesús les dijo: Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. No he venido a llamar a justos, sino a pecadores” (Marcos 2:17)
  • “Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras, y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras; y que apareció a Cefas, y después a los doce. Después apareció a más de quinientos hermanos... después apareció a Jacobo; después a todos los apóstoles; y al último... me  apareció a mí” (1 Corintios 15:3-9)
  • “Dios, habiendo levantado a su Hijo, lo envió para que os bendijese, a fin de que cada uno se convierta de su maldad” (Hechos 3:26)
Así también nos pedirá cuenta de nuestra vida y conducta, a cada uno en particular:
  • “Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo” (2 Co 5:10)
  • “Y si invocáis por Padre a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación...” (1 Pedro 1:17)
Recordemos: Dios nos conoce a cada uno en particular y obra en nosotros de manera individual...
TBS

miércoles, 18 de septiembre de 2013

Servidores Eficientes

En la Biblia leemos: “...servíos por amor los unos  a los otros” (Gálatas 5:13)

El corto artículo decía: “El secreto: el método, la clave del servicio”. Los creadores de una firma que promete un servicio superador dicen que el diferencial más importante se basa en el método. Divide a sus trabajadores en grupos, logra eficiencia a través de la perfecta identificación de la responsabilidad de cada integrante. Están quienes se encargan de..., los que preparan las..., y finalmente los que...

Ellos entienden que ésta es la mejor manera de sacar provecho de las habilidades de cada uno, creándoles al mismo tiempo la responsabilidad de saber que son necesarios y que deben cumplir con su parte para que el resto del equipo pueda lograr sus metas.
Dios nos dice que cada uno de nosotros, sus hijos, tenemos una responsabilidad otorgada personalmente por El:
  • “Por tanto, id, y hace discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo” (Mateo 28:19-20)
Para lograr esta meta ineludible, Dios nos entregó dones:
  • “Así nosotros, siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos de los otros. De manera que, teniendo diferentes dones, según la gracia que nos es dada...” (Romanos 12:6-8)
  • “No quiero, hermanos, que ignoréis acerca de los dones espirituales... Ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo” (1 Corintios 12:1,4)
  • “Por lo cual dice: Subiendo a lo alto, llevó cautiva la cautividad, y dio dones a los hombres” (Efesios 4:8)
  • “Y él mismo constituyó a unos apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros.” (Efesios 4:11)
En esta condición, espera de nosotros que seamos eficientes en llevar  a cabo la Misión y lograr el Objetivo:
  • “Así también vosotros; pues que anheláis dones espirituales, procurad abundar en ellos para edificación de la iglesia” (1 Corintios 14:12)
  • “...a fin de perfeccionar  a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo, hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto,  a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo” (Efesios 4:12-13)
  • “Conforme a la gracia de Dios que me ha sido dada, yo como perito arquitecto puse el fundamento, y otro edifica encima; pero cada uno mire como sobreedifica” (1 Corintios 3:10)
  • “Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él; arraigados y sobreedificados en él, y confirmados en la fe, así como habéis sido enseñados, abundando en acciones de gracias” (Colosenses 2:6-7)
Nunca perdamos de vista que si somos hijos de Dios, El nos dio lo necesario y espera que hagamos buen uso de ello, como dice en  Romanos 11:29:
  • “Porque irrevocables son los dones y el llamamiento de Dios”
Recordemos: Cada uno de nosotros tenemos esta responsabilidad y debemos velar para cumplirla...
TBS