Dios es Nuestro Beneficio…

Leer Salmo 116

“El tema de este Salmo es el amor personal, fomentado por una experiencia personal de la redención, y en él vemos a los redimidos que reciben respuesta a la oración, son preservados en el tiempo de la tribulación, reposan en su Señor, andan conscientes de sus obligaciones, conscientes de que no son suyos, sino comprados por precio, y uniéndose a toda la compañía rescatada para cantar aleluyas a Dios” (Charles Spurgeon)

Un Problema Concreto…

• “Amo a Jehová, pues ha oído mi voz y mis súplicas… Oh, Jehová, libra ahora mi alma” (Salmos 116:1-4)

“Es una gran cosa decir: “Amo al Señor”, porque la más dulce de las gracias y la más segura de todas las evidencias de la salvación es el amor. Es una gran bondad de parte de Dios que condescienda a ser amado por unas criaturas tan pobres como somos nosotros, y es una prueba segura de que Él ha estado obrando en nuestro corazón” (Charles Spurgeon)

¿Cuál era el problema que aquejaba al salmista?

1. Compromisos: “ligaduras”. Esta circunstancia le generaba un gran apuro y riesgo de muerte. La palabra “ligaduras” nos hace pensar que en parte él mismo era responsable por la situación en que se encontraba…
2. Congoja: “angustia”. La idea de “angustia” es la sensación que se tiene cuando una cuerda aprieta más de lo aconsejado. Las “ligaduras” lo estaban literalmente estrangulando
3. Consecuencias: “dolor”. El resultado concreto y efectivo era un dolor lacerante que le afectaba en todo su ser… En este punto “invocó” al Señor para que “libre su alma”… Todas las figuras concuerdan para darnos una idea bien clara de la situación que atravesó el autor del Salmo…

Un Propósito Claro…

• “Clemente es Jehová, y justo… Andaré delante de Jehová en la tierra de los vivientes…” (Salmos 116:5-11)

“Andar” es una expresión que enfatiza un propósito de vida. La Biblia nos enseña a vivir de acuerdo a la altura de nuestra condición espiritual. Nuestro andar en el Señor debe ser:

1. Digno: “andéis como es digno” (Efesios 4:1)
2. Diferente: “no andéis como los otros gentiles” (Efesios 4:17)
3. Dispuesto: “andad en amor” (Efesios 5:2)
4. Distinguido: “Andad en el Espíritu” (Gálatas 5:16)

Concretamente, como dice el Apóstol Juan: “El que dice que permanece en Él, debe andar como Él anduvo” (1 Juan 2:6)

Una Pregunta Clave…

• “¿Qué pagaré a Jehová por todos sus beneficios para conmigo?...” (Salmos 116:12-19)

John Mac Arthur dice: “Dios no necesita nada ni pone precio a su misericordia y gracia libres. El salmista da su único don aceptable, obediencia y acción de gracias”. También William Gurnall reflexionaba: “Una obediencia parcial no es buena, de modo que unas gracias parciales son sin valor. Un alma honrada no intentará disimular o esconder toda deuda que tenga con Dios, sino que reconoce que ha de rendir cuentas de todos sus beneficios. El saltarse una nota en una melodía echa a perder la gracia de la música; la ingratitud a una misericordia desbarata nuestro agradecimiento al resto”

De manera práctica el salmista nos dice que reconocer Su Gracia es una forma de “pagar” a Dios por Sus Beneficios y nos enseña que la clave se encuentra en:

1. Creer: “Tomaré la copa de la Salvación…”
2. Confiar: “Invocaré el Nombre de Jehová”
3. Confesar: “Pagaré mis votos”. Testimonio Público.

Recordemos: ¿Qué pagaremos al Señor por Sus Beneficios?

DECH