lunes, 17 de diciembre de 2012

Nos sostiene...


En la nota, eran entrevistados algunos de los sobrevivientes de un accidente aéreo ocurrido hace 40 años: “Vivir y volver a contarlo... sobrevivientes del tristemente célebre accidente del turborreactor Fairchild 571 que se estrellara en la Cordillera de los Andes en 1972, con 45 pasajeros a bordo, entre ellos los integrantes de un equipo de rugby... Luego de muchos días en las montañas de hielos eternos, con la búsqueda de sobrevivientes suspendida y sin muchos recursos para salir adelante, se decidieron a buscar ayuda por su cuenta”

Sobre ello dicen: “La idea era armar una expedición que saliera para el lado de Chile, para encontrar los valles verdes que suponíamos que estaban allí detrás. Ahí estábamos seguros que encontraríamos alguna población donde pedir ayuda”

¡Terrible experiencia! Al leer estas palabras, pensé en el Salmo 23 y lo que el Señor nos dice acerca de Su Guía, Su Sostén y Su Provisión:
  • “Jehová es mi pastor, nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma, me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre. Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; tu vara y tu cayado me infundirán aliento. Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando. Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, y en la casa de Jehová moraré por largos días”
Sin importar qué tipo de experiencias atravesemos, debemos saber que siempre y especialmente cuando es muy difícil lo que vivimos, allí está el Señor para sostenernos y fortalecernos.
  • “...me tomaste de la mano derecha, me has guiado según tu consejo...” (Salmos 73:23-24)
  • “Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo” (Isaías 41:13)
  • “Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti” (Isaías 43:2)
  • “Jehová es bueno, fortaleza en el día de la angustia; y conoce a los que en él confían” (Nahum 1:7)
El Señor Jesucristo también dejó esta promesa:
  • “Volvió, pues, Jesús a decirles: De cierto, de cierto, os digo: Yo soy la puerta de las ovejas... Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos” (Juan 10:7-9)
El Señor nos da todo lo necesario... estemos atentos a no tener la actitud que vemos en Oseas 13:5-6:
  • “Yo te conocí en el desierto, en tierra seca. En sus pastos se saciaron, y repletos, se ensoberbeció su corazón; por esta causa se olvidaron de mí”
Recordemos: Las Promesas del Señor nos sostendrán en lo más duro del sendero de la vida... No nos olvidemos luego de El...
TBS

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